Restuarado en la primera mitad del siglo XVII, como consecuencia de mantener la actividad defensiva del castillo debido a la piratería berberisca que asolaba las costas durante los siglos XVI y XVII. Ya en el siglo XVIII se adaptaron parte de las murallas para la instalación de artillería y durante la Guerra de la Independencia, sirvió de acuartelamiento a las tropas hispano-británicas que defendieron Tarifa del ejército francés en los años 1811 y 1812. |