| Fragmento de los azulejos de la capilla del Nazareno de Santa María (1679). | | Excepto contados ejemplos de cerámica nacional, abundan en nuestras iglesias y casas particulares la procedente de Holanda y en concreto de la ciudad de Delf. Quizá lo más conocido son los azulejos que hay en la Iglesia de Santa María y que han sido recientemente restaurados. La cerámica de Delf tuvo su punto álgido a mediados del siglo XVII, cuando se convirtió en el centro más importante de loza. | | Detalle de uno de los azulejos. | | Tuvo mucho que ver la popularidad que tenía en esos momentos la porcelana china azul y blanca, que se puso de moda a raiz de su importación por la Compañía Holandesa de las Indias Orientales. La loza de Delf copió los diseños orientales y realizó gran cantidad de piezas útiles y de adorno. A medida que avanzó el siglo se impusieron las decoraciones en azul y blanco pero con motivos religiosos, mitológicos o paisajes holandeses. |